CLÍNICA ESTÉTICA DENTAL MADRID
LA ODONTOLOGÍA ESTÉTICA: el equilibrio perfecto entre salud y belleza
Hoy en día, casi todo el mundo quiere tener una sonrisa bonita, que resulte atractiva y que le haga sentirse seguro de sí mismo. La mayoría de las personas ya no solo acuden al dentista buscando una correcta salud bucodental sino que también quieren que se logre de forma estética.
Según la Academia Americana de Odontología Cosmética, el 80% de los encuestados afirmaban que la sonrisa era uno de los aspectos en los que más atención prestaban a la hora de conocer a alguien por primera vez. Esto determina que, en muchas ocasionas, las personas sientan inseguridades a la hora de desenvolverse socialmente si no pueden reflejar una sonrisa saludable y armónica.
Se puede decir que la estética es una expresión del bienestar, que refleja la armonía, la belleza y el equilibrio de la salud, y que además, la sonrisa es una de las expresiones faciales que más nos diferencia del resto de los animales. Es por esto que cada vez cobra más importancia el término “odontología estética” y que las personas se preocupen más por su salud bucodental.
La estética y belleza natural individualizada.
La estética no es algo nuevo ni mucho menos. El término estética proviene del griego, “aísthêsis”, el cual significa percepción. Así pues, podemos definir la odontología estética como la aplicación del arte y de la ciencia enfocada a fomentar y realzar la belleza de la sonrisa.
Actualmente, existen en el mercado un amplio abanico de materiales y técnicas que permiten lograr resultados funcionales y estéticos sin dañar la salud de los dientes y construyendo la sonrisa que mejor se adapta a cada boca. Esto permite desenvolver la belleza natural en relación a la forma y función adaptada a la individualidad de cada persona.
Entre los objetivos que persiguen estas técnicas, se encuentra el de corregir el deterioro del tono, brillo y estructura de los dientes provocado por factores como la genética, la edad, malos hábitos o enfermedades.
Pero en definitiva, este camino debe recorrerse teniendo en cuenta que la estética es un aspecto subjetivo y personal, con lo que se debe colaborar con el paciente para lograr sus expectativas y deseos siempre dentro del marco de las posibilidades reales que existan en el procedimiento.